El Prado lo anunció: el 6 de enero terminaba la exposición de Rembrandt. Pero, al parecer, la exposición expiró exactamente a las 14 horas. En la tarde del 6, día de Reyes, un puñado de almas asomó por el Museo, pero éste, a pesar de estar iluminado por dentro y por fuera, permanecía cerrado a cal y a canto. ¿Tiene sentido ir a una exposición en las últimas horas previas a su cierre? Sin duda. Aunque sea sólo para ver dos cuadros. Pero al elegir la fecha del 6 como final, ¿se estaba diciendo que la fecha límite era realmente el 5? Tal vez. Una fecha imposible, por cierto, porque era el día de llegada de Reyes y de la compra de regalos familiares. Por el contrario el 6, una vez cumplido con el ritual de regalar y de que los niños estuvieran ya con sus juguetes, prometía un descanso, un paréntesis, un museo.... Pero el final fue otro.
Otro final es una sugerente colección de 451 Editores para recrear películas e historias conocidas. Una de las más emblemáticas es la de Casablanca: ¿qué hubiera ocurrido si ella se hubiera ido en el avión con Bogart y no con el héroe? Un nuevo final para viejas e imprescindibles historias. Lourdes Ventura y otros narradores son los encargados de dar otra vuelta de tuerca a los finales establecidos.