Cristina Cerezales, hija de Carmen Laforet y escritora, además de pintora en la primera parte de su vida, ha publicado un libro no sólo sobre su madre, sino desde ella misma, desde la voz desdoblada de hija que sabía de la autora de Nada lo que probablemente nadie sabía. Música blanca, que así lo titula, recorre la vida de Laforet desde la mirada de la hija, desde el final al principio, desde ese silencio físico y vital en que se sumió la escritora cuando decidió no ya dejar de escribir sino escapar de sus limitaciones y circunstancias.
Cuando escribí Mujeres de la posguerra (Planeta 2002) uno de cuyos ejes centrales gira en torno a Carmen Laforet, publiqué casi toda la vida de la autora, al menos casi toda la vida que yo conocía. Y lo que no escribí fue porque no lo sabía o porque no estaba segura de si lo sabía. Ahora Cristina escribe lo que sólo ella puede ofrecer al lector. Desde la cercanía y la media distancia que le proporciona el doble hecho de que Carmen Laforet y su marido, Manuel Cerezales, de quien se separó en la segunda parte de su vida han muerto, rescata a su madre del olvido y de las interpretaciones y hasta ensaya su voz, que en el texto aparece entrelazada y diferenciada de la suya. Los que aman a CLaforet encontrarán mucha música, blanca casi siempre, pero no por ello menos intensa, en esta obra firmada por su hija y editada por Destino.
Cuando escribí Mujeres de la posguerra (Planeta 2002) uno de cuyos ejes centrales gira en torno a Carmen Laforet, publiqué casi toda la vida de la autora, al menos casi toda la vida que yo conocía. Y lo que no escribí fue porque no lo sabía o porque no estaba segura de si lo sabía. Ahora Cristina escribe lo que sólo ella puede ofrecer al lector. Desde la cercanía y la media distancia que le proporciona el doble hecho de que Carmen Laforet y su marido, Manuel Cerezales, de quien se separó en la segunda parte de su vida han muerto, rescata a su madre del olvido y de las interpretaciones y hasta ensaya su voz, que en el texto aparece entrelazada y diferenciada de la suya. Los que aman a CLaforet encontrarán mucha música, blanca casi siempre, pero no por ello menos intensa, en esta obra firmada por su hija y editada por Destino.