martes, 8 de julio de 2008
Harta del nuevo fascismo contra los gitanos
La deriva xenófoba del gobierno italiano contra los gitanos es intolerable. Las viejas prácticas nazis de señalar y etiquetar a los judíos se renuevan ahora con esa ficha que deben rellenar los inmigrantes, gitanos por más señas, en la que figura el apartado, "etnia", concepto desfasado y delator, que es toda una declaración de autoinculpación para quien estampe ahí sus datos. No los van a llevar a los trenes de la muerte ni a los hornos crematorios, pero sí a una expulsión segura, o a una preventiva acusación de delincuentes, o incluso a completar u censo inconstitucional de gente diferente. ¿Apestada? Demencial. El concepto de etnia es cada vez más difuso, no hay pueblos, ni judíos ni gitanos peculiares que merezcan ser señalados como distintos. Lo que importa son los hechos y conductas individuales, como garantiza la frágil y ¿agonizante? Constitución europea. En Italia estamos ante una bochornosa conculcación de los derechos humanos, una vulgar y rabiosa actitud racista que es inmoral de principio a fin. Harta estoy de esta nueva encarnación de Mussolini, harta de este nuevo fascismo contra los gitanos. ¿Cuáles serán los siguientes? ¿O se conformarán con tener a tan peligroso pueblo fichado y sometido?